2018 fue un buen año para las grandes empresas españolas

Según datos del Banco de España las grandes empresas españolas duplicaron sus beneficios en un 2018 realmente próspero para este tipo de organizaciones.

El crecimiento fue muy elevado en sus resultados ordinarios y también extraordinarios. Además, se produjo una mayor creación de empleo fijo durante el años anterior, la subida de los salarios, reducción de la deuda y disminución de intereses.

Los datos han sido obtenidos a través de una encuesta realizada entre 960 sociedades y se considera que tiene un sesgo hacia las empresas de mayor tamaño.

El contexto de mayor demanda ha favorecido el aumento de la cifra de negocio, que se ha incrementado en un 7,2% durante 2018.

Respecto al valor añadido bruto (que se expresa como las ventas de la compañía restándole las compras) aumentó en un 3,3% durante dicho año.

El aumento fue general en todos los sectores excepto en la industria.

El gasto en personal también experimento un crecimiento de un 3%, que tiene su explicación tanto en la ampliación de las platillas como en el aumento de las remuneraciones medias.

Los salarios medios, tras una subida hace dos años del 0,5% subieron en 2018 un 1,5%.

El empleo, sin embargo, subió un 1,5%, muy por debajo del 3% que aumentó en el año 2017. No obstante se produjo un buen incremento de la contratación fija, hasta un 1,9% y se dio la circunstancia de que los empleos temporales tampoco se redujeron de forma significativa, tan solo un 0,1%.

El Banco de España concluye en su informe que el porcentaje de empresas que crea empleo en España (un 50,3%) es muy superior al que lo destruye (un 34,2%).

Dado que los gastos financieros experimentaron una reducción, los resultados ordinarios netos aumentaron en un 5% según este informe. Algo más del 4,7% registrado en 2017.

A pesar de ello fueron los resultados extraordinarios los que han dado un espaldarazo definitivo a las cuentas para que hayan sido tan positivas. Se entiende por resultados extraordinarios aquellos gastos e ingresos atípicos que no están directamente relacionados con el negocio principal y recurrente, sino que tienen que ver con la venta de activos, plusvalías o impuestos.

El impacto de estos gastos extraordinarios ha hecho que el resultado final haya aumentado en un 102%, es decir que los beneficios de las grandes empresas se han visto duplicados en el año 2018.