Mitos vs Realidad: las mentiras más comunes acerca de los detectives privados

Seguro que todos nosotros estaremos hartos de escuchar historias sobre detectives privados que han conseguido resolver casos que ni tan siquiera la policía sabía resolver, sobre todo en el caso de diversas películas y libros que cuentan historias de ficción y de aventuras con detectives privados como protagonistas. Pero más allá del cine y la literatura, para nadie es un secreto que la profesión de detective o investigador privado se encuentra actualmente en auge.  Para entender más acerca de esta apasionante profesión, es necesario aclarar que no todo lo que hemos escuchado acerca de ella es cierto ya que hay algunas creencias y observaciones que provienen más de la literatura y el cine que de la propia profesión de detective privado. Por ello, es necesario conocer algunos falsos mitos acerca de esta profesión.

El primero de estos falsos mitos, y quizá uno de los más extendidos, es que los detectives privados solo se dedican a investigar asuntos sentimentales relacionados con infidelidades. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. Es cierto que este es uno de los temas estrella para los detectives privados. Sin embargo, las investigaciones sentimentales se han reducido de forma sustancial en los últimos años en beneficio de otro tipo de casos como los fraudes fiscales y fraudes de todo tipo, así como desapariciones y otro tipo de casos.

Otro de los grandes fasos mitos que hay en torno a la profesión de detective privado es la falsa creencia de que cualquier persona puede dedicarse a ella. Pero esto no es para nada así, ya que para ser detective privado, además de contar con unas cualidades innatas tales como la intuición, el sentido común y la curiosidad entre otras muchas, es necesario llevar a cabo una formación específica que te acredite como tal, una formación que no se dará por válida hasta tener el diploma y la licencia que te acredite como tal después de haber realizados todo tipo de pruebas teóricas, físicas y psíquicas, además de cumplir otros requisitos de carácter legal como no tener antecedentes penales y no pertenecer al ámbito de los funcionarios. Como vemos, no todo el mundo puede ser detective privado ya que los requisitos que se necesitan para ello son numerosos.

Y no podemos hablar de falsos mitos acerca de la profesión de detective privado sin mencionar una de las falsas creencias más extendidas como es el hecho de que muchas personas creen que por el hecho de ser detective privado se obtiene prácticamente inmunidad. Por el contrario, los detectives privados en Madrid están muy vigilados por la ley para que no puedan hacer nada más allá de sus funciones. Por ejemplo, cuando graban una conversación, es necesario que esta se haya realizado con el consentimiento de la otra persona, ya que en caso contrario no valdría como prueba y quedaría invalidad, incluso podrían sancionar al detective privado si decide llevar a cabo algún tipo de grabación sin el oportuno consentimiento.