Cargando…La carne mechada cede al miedo en Andalucía
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De hasta 22 toneladas en años anteriores, se ha reducido la producción de carne mechada en Andalucía hasta 1,5 toneladas. Podría mantenerse esta tendencia hasta mínimos históricos en los próximos meses o años.
El pasado brote este verano de listeriosis, con principal foco en la Comunidad Autónoma del sur de España, ha motivado un miedo colectivo a consumir esta carne, hasta el punto de que se desconfía de una pronta recuperación.
Un 60% de reducción del consumo
Según ANICE (Asociación Nacional de Industrias de la Carne de España), las consecuencias de la listeriosis podrían llegar a reducir el consumo hasta un 60%. Sin embargo, los efectos sobre la Comunidad Autónoma son mucho mayores.
De hecho, podrían ser todavía más graves. La industria cuenta actualmente con 530 compañías que emplean hasta 8.800 profesionales. El despido, lamentablemente, se presenta como la medida de contención más rápida para paliar la falta de demanda.
Una promoción favorable de la carne mechada
No obstante, el objetivo tendrá que ser mejorar la imagen que se tiene de la carne mechada. Los profesionales aseguran que han escuchado conversaciones de gente desaconsejando a otros consumidores, la compra de carne mechada por la listeriosis. Obviamente es una desinformación dañina para la industria.
Por ese motivo, se está planteando una promoción publicitaria de la carne mechada, que exponga los beneficios de su consumo y explique la ausencia de riesgo, en los nuevos lotes de carne disponibles.
También quiere asociarse la carne mechada con las tradiciones andaluzas, con el fin de fomentar su consumo, no solo de manera general, sino específicamente la proveniente de Andalucía, por su calidad y sus efectos saludables.
Consecuencias prácticas de la crisis
La crisis de la carne mechada en Andalucía no solo ha mostrado consecuencias en la práctica sobre la producción. También las empresas comienzan a tener que tomar decisiones drásticas.
Además, no hay una diferencia notable entre provincias. Prácticamente todas las andaluzas se han visto afectadas por la crisis de la carne mechada.
Pero además, se han visto obligadas también a cerrar hasta algunos meses, dada la nula demanda de producto. La apertura en Navidad esperaba solventar esta situación, pero la producción está bajo mínimos.
Por otra parte, los despidos han comenzado a incrementarse. Sin producción ni ventas, las empresas prescinden primero de los profesionales más enfocados a campañas como Navidad y, posteriormente, tienen que reducir personal ante la falta de negocio.
