Cada vez hay más autónomos en España pero siguen igual de descontentos

Las empresas siguen sin contratar personal en España, al menos de forma suficiente como para revertir la situación inestable del empleo. Sí que se mueve el sector de los autónomos: muchos españoles encuentran en el autoempleo una salida para conseguir, al menos, ganarse la vida.

Los datos aportados por la RETA (Régimen de Trabajadores Autónomos de la Seguridad Social) confirman el párrafo anterior. El trabajo autónomo está subiendo en España. En el pasado mes de junio se ha incrementado en aproximadamente 11.000 personas y las cifras ya superan los 3,2 millones de trabajadores autónomos en nuestro país, una cantidad que no se alcanzaba desde el año 2011.

Adecco e Infoempleo han publicado un análisis del trabajo autónomo en España, titulado “Informe Infoempleo Adecco 2015: Oferta y demanda de empleo en España”, con el objetivo de conocer mejor situación y las perspectivas actuales de empleo.

Según el estudio el 41,8% de las personas que han optado por esta salida laboral reconoce haberse hecho autónomo por necesidad, no precisamente por necesidades de autorealización emprendedora. Quizá por ello, 7 de cada 10 autónomos reconoce preferir un trabajo por cuenta ajena a tiempo completo a seguir siendo autónomo.

Los autónomos españoles hacen frente a una situación incómoda: sufren elevadas cargas fiscales y administrativas, hecho considerado el mayor obstáculo para el 54,3 de ellos. Por su parte la alta fiscalidad es el principal inconveniente de esta fórmula de empleo en España para el 47%.

Para entender y contextualizar mejor todos estos datos, el estudio precisa el perfil del trabajador profesional autónomo en el marco laboral español.  En líneas generales los autónomos españoles suelen tener formación superior universitaria, por encima del resto de sectores. El 64,3% tiene título universitario: un 39,7% han acabado sus estudios de carrera o grado, postgrado lo ha hecho un 23,8% y  doctorado tan solo un 0,8%.

Otro dato interesante es el reparto que se hace de estos profesionales a lo largo y ancho de toda la geografía española: 4 de cada 10 profesionales autónomos residen en Madrid o Barcelona.

El 63,7% trabaja dentro del sector servicios, un 82% no tiene empleados que dependan de él y la facturación no alcanza los 100.000 euros anuales en un 91,9% de los casos.

Lo más frecuente para estos trabajadores freelance es realizar su trabajo desde casa, un factor que también suele influir en la decisión de optar por esta vía laboral, y que no acostumbra a ser tan frecuente en el caso de los trabajadores por cuenta ajena.

En cuanto a los modos de financiación, el 68,7% ha echado mano de sus propios ahorros para poner en marcha el negocio y el resto han recurrido a amigos o familiares para la primera inversión.

Otro dato revelador es que el 70,8% de los autónomos considera que las políticas que el gobierno español ha llevado a cabo no han sido eficaces para combatir el desempleo.