Los fraudes online más habituales en el e-Commerce
España ocupa el cuarto lugar en ventas online a escala mundial. Al mismo tiempo es uno de los países donde el fraude relacionado con el comercio digital es más alto. Casi la mitad de los españoles que realizan compras online aseguran haber sido víctimas de algún intento de estafa o timo en la compra-venta.
El mercado español del comercio online mueve más de 2.300 millones euros y se venden más de 600 objetos usados por minuto en las diferentes plataformas . Por ello, es preciso crear herramientas que garanticen a compradores y vendedores la seguridad en sus transacciones online.
La proliferación de diferentes canales de venta y formas de pago ha hecho aumentar los casos de fraude. Sobre todo en aquellas plataformas que publican sus anuncios sin garantía ni responsabilidad sobre el uso que los usuarios hagan.
Los timos online más frecuentes que se dan en estos canales son los siguientes:
Caso del vendedor desaparecido: en determinadas plataformas de compra-venta, los usuarios pueden registrarse y publicar sus anuncios sin mayores requisitos, de forma que en cualquier momento pueden desaparecer sin dejar apenas rastro. Este es un timo frecuente en los casos de ventas entre particulares. Puesto que muchas veces se solicitan pequeños adelantos para gastos de envío, cuando el vendedor desaparece el comprador pierde ese dinero. Son pequeñas cantidades, pero si el timo se realiza con frecuencia el estafador puede acabar acumulando una buena suma.
Caso del comprador falso: un tipo de operación fraudulenta que se da más en mercados de productos de alto valor, como el de coches o el inmobiliario. En este caso el comprador transfiere el importe del artículo y el vendedor recibe la confirmación de la operación. Sin embargo, el dinero permanece inmovilizado hasta que el vendedor hace el ingreso en el soporte logístico a través de una web falsa. Cuando el vendedor se da cuenta del fraude ya ha realizado el ingreso y pierde su dinero y el objeto vendido.
Tiendas online fraudulentas: en este caso el vendedor tiene un producto a la venta a buen precio en alguna de las plataformas más conocidas. Cunado algún comprador se interesa se le informa de que ese producto ya no está disponible y se le remite a otro portal donde se encuentra un producto de similares características. Este suele ser un portal falso que sólo admite como forma de pago la transferencia bancaria. Y cuando el comprador efectúa el pago, el vendedor desaparece sin que se le pueda seguir el rastro.