7 de cada 10 pymes utilizarán la nube en 2017

Se calcula que a finales del año que viene el 70% de las pequeñas y medianas empresas utilizará la nube, en un cambio evolutivo que está llegando por necesidad. Cualquier pyme, tanto la que se está abriendo camino como la que ya está asentada y busca adaptarse a los nuevos tiempos, necesita herramientas que les permitan ser realmente competitivas.

Cada vez más las pymes utilizan los servicios de cloud computing, como Dropbox, Google Drive, One Drive de Microsoft…

Sus ventajas más llamativas son su flexibilidad, ya que se puede acceder a la nube desde cualquier lugar siempre que haya Internet, y el hecho de que se puede trabajar online, que facilita un nuevo tipo de organización del trabajo en las empresas.

Sin embargo, otro flanco importante que cubre el trabajo en la nube es el de la seguridad. Uno de los aspectos que más preocupa a las empresas es la pérdida de datos e información. Por eso la protección de datos es crucial para cualquier organización, para garantizar su continuidad después de cualquier percance. Según algunos estudios, la mitad de las empresas que se ven obligadas a efectuar un parón después de una pérdida de datos ven cómo se resienten sus ventas.

Una pyme no se puede permitir grandes inversiones en infraestructuras ni despliegues tecnológicos comparables a lo que ofrecen los servicios en la nube. Por eso, el cloud computing representa una solución eficiente.

Otro aspecto que los servicios en la nube son capaces de potenciar es la propia productividad de la empresa. Gracias al cloud computing cualquier trabajador puede acceder a los recursos necesarios para desarrollar su tarea se encuentre donde se encuentre y en cualquier momento del día. Por lo tanto la nube permite aprovechar mejor el tiempo y eliminar desplazamientos innecesarios, por lo que se convierte en una herramienta fundamental para elevar la productividad y mejorar la conciliación laboral.

Otra de las ventajas de utilizar los servicios en la nube es que resulta mucho más económico que intentar implantar soluciones tradicionales dentro de la empresa. Supone un ahorro para las empresas en software y hardware (se calcula que hasta un 30% en software y un 40% en hardware) y también, muchas veces, en mantenimiento técnico. Además, permite a cada empresa utilizar aquellos servicios que necesita, es decir, disponer de un servicio a medida.

Algunos expertos han señalado que aquellas pymes que no sean capaces de dar el salto a la nube acabarán desapareciendo en tan solo unos años. De momento, parece que la mayoría de ellas, hasta un 70% va a apostar por este servicio a corto plazo.