El problema de la conciliación para el autónomo español
Uno de los principales problemas para cualquier trabajador/a autónomo es el de la conciliación de la vida laboral con la personal.
De acuerdo con un reciente estudio de la ATA (Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos), el 78% de los trabajadores que trabajan por cuenta propia realizan jornadas laborales que igualan o superan las nueve horas diarias.
Por lo tanto, según estos datos, más del 50% del día hábil (sin contar las horas que se pasan durmiendo) las dedica cualquier autónomo a su actividad laboral.
A pesar de que la reciente regulación de las horas extra no afecta a los autónomos que no tienen trabajadores contratados, lo cierto es que la mayoría de ellos realizan horas extra sobre una jornada laboral estándar de ocho horas. Sin embargo, en la guía publicada por el Ministerio de Trabajo los autónomos figuran como un colectivo exento de anotar las horas de inicio y finalización de la jornada. Lo que no quiere decir que no trabajen más de lo estipulado en una jornada laboral, como se acaba de comentar.
Otro dato concluyente es que uno de cada cinco autónomos dedica tiempo a su negocio todos los días de la semana, por lo que en realidad no llegan a descansar ni a oxigenarse nunca.
Si hablamos de las vacaciones, las de los autónomos suelen ser las más breves: de una muestra de 1.300 trabajadores por cuenta propia, solo el 5% tiene periodos vacacionales superiores a los 30 días, y un 73% no llegan nunca a disfrutar 20 días al año de vacaciones.
Los principales obstáculos para la conciliación que se identifican son el exceso de trabajo y la mucha dedicación que demanda el propio negocio. No tener un horario fijo es la causa que reconocen el 30% de los autónomos encuestados. Las cargas de trabajo son la causa para el 15%, con la presión del cliente incluida. La combinación de todos estos factores lleva a que los autónomos no sean capaces de conciliar.
Otra cuestión es la baja por enfermedad, que los autónomos en muchos casos no la cogen. La cifra de autónomos que coge la baja laboral es inferior a la de los trabajadores por cuenta ajena, aunque es cierto que el periodo medio que están de baja estos últimos es sensiblemente más largo.
El tiempo medio de las bajas de enfermedad de los autónomos es de 92 días, cifra que triplica la de un asalariado por cuenta ajena, cuyas bajas laborales tiene una media de 39 días.