¿De verdad hemos salido ya de la crisis?
Los datos oficiales y los macroeconómicos son concluyentes: España se encuentra en una fase de clara recuperación económica. La tasa de desempleo sigue disminuyendo y las perspectivas, según nos aseguran, son optimistas para la economía española.
La preocupación del gobierno ya no parece centrarse en la economía. Sin embargo, todavía hay muchas familias que no llegan a fin de mes y que se preguntan cuándo les alcanzarán a ellos esos vientos favorables que tanto se pregonan.
Gente a la que le cuesta encontrar un trabajo y que cuando lo encuentran, lo hacen en unas precarias condiciones que no tienen más remedio que aceptar. Personas a las que les cuesta un esfuerzo titánico pagar sus facturas y que no consiguen ahorrar ni un euro al mes. Los mismos y mismas que saben a ciencia cierta que sus salarios están por debajo de lo que cobraban antes del estallido de la crisis, y que también son conscientes de que los precios han subido mucho desde entonces. Es decir, son más pobres.
Según los datos del informe de Oxfam Intermón titulado “Una economía para el 99%”, durante los años de la crisis las 3 personas españolas más ricas incrementaron su fortuna en un 3%, mientras que el 30% más pobre perdía el 30% de su riqueza.
Ahora ya está superada la crisis según el Gobierno de España: la economía está creciendo, se conceden más créditos a empresas y familias, la demanda de consumo interna se recupera, se invierte más en vivienda, aumenta el turismo externo, suben las ventas de coches… Sin embargo, parece que algo falla, que esa bonanza económica no es para todos. Otro informe de Oxfam Intermón indica que la recuperación económica española ha beneficiado cuatro veces más a los ricos que a los más pobres.
Solo a lo largo del último año el 1% más rico acaparó el 40% de toda la riqueza creada, mientras que el 50% más pobre solo pudo optar al reparto del 7% de dicho crecimiento.
Si a estos datos sumamos el hecho de que, según un estudio reciente, la mitad de las grandes fortunas españolas proceden de forma directa o indirecta de herencias y que, en muchos casos, no pagan impuestos o no tantos como deberían gracias a técnicas de ingeniería fiscal y defraudación, tenemos una radiografía de la situación más completa.
Además, hay que tener en cuenta que los impuestos recaen en un 83% sobre las familias a través del IVA y el IRPF. El impuesto de sociedades aporta tan solo un 12% de la recaudación total.